El Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) de Argentina ofrece servicios de cuidado infantil a sus miembros, entre quienes se encuentran personas trabajadoras de los sectores del reciclaje, del trabajo comunitario, de la industria del vestido y de la venta ambulante. Este estudio de caso documenta cómo los Centros Infantiles de Recreación y Aprendizaje (CIRA) respondieron a la pandemia de la COVID-19 mediante el compromiso con la comunidad y la adaptación de los servicios de cuidado infantil para apoyar a las personas trabajadoras y a las infancias en sus hogares. La efectividad de la respuesta de los centros de cuidado infantil radica en el poder de decisión que tienen las personas trabajadoras comunitarias que dirigen el centro junto con el equipo técnico. Las personas trabajadoras comunitarias son a su vez miembros del MTE, de la economía popular, y tienen fuertes vínculos con la comunidad.