2021 fue otro año difícil para lxs trabajadorxs en empleo informal: sus ingresos permanecieron muy por debajo de los niveles previos a la pandemia, mientras que el hambre y el endeudamiento obstaculizaron enormemente su recuperación. La crisis no ha terminado en lo absoluto para estxs trabajadorxs, por lo que ahora es cuando importa examinar lo que hemos aprendido de la pandemia en 2021, con el propósito de apoyarles mejor en 2022.

Gracias al estudio de WIEGO sobre la crisis de la COVID-19 y la economía informal, pudimos escuchar a lxs trabajadorxs y, recurriendo también a nuestro trabajo programático, destilamos cinco lecciones valiosas.


Brindar apoyo financiero

A corto plazo

Puesto que sus ingresos no han regresado a niveles previos, lxs trabajadorxs nos dijeron que necesitan apoyo para sus necesidades materiales inmediatas, capital para sus negocios –en forma de subsidios o préstamos– y ayudas para cubrir gastos. Como resultado de esta lenta recuperación de ingresos, la inseguridad alimentaria sigue amenazando a lxs trabajadorxs urbanxs: cerca de un tercio de lxs trabajadorxs con quien hablamos nos dijeron que una persona adulta o menor de su hogar había pasado hambre en el mes previo.

Los subsidios de ayuda son particularmente urgentes para lxs trabajadorxs en domicilio porque, en su mayoría mujeres, son a quienes peor ha afectado la pandemia debido al colapso de las cadenas de suministro nacionales y mundiales; muchxs todavía no perciben ingresos.

Lxs trabajadorxs en domicilio de la industria del vestido son frecuentemente empleadxs bajo modalidades contractuales complejas que buscan evitar los costes ligados a los contratos de trabajo. A principios de la pandemia, WIEGO –junto con la Alianza por un Salario Mínimo en Asia, HomeNet del Sur de Asia y HomeNet del Sureste de Asia– apeló a las marcas y los comerciantes minoristas para que desembolsaran, por única vez, una contribución de auxilio por la COVID-19 a todxs lxs trabajadorxs textiles en empleo informal de sus cadenas de suministro, como una medida empresarial responsable durante la pandemia.

Lectura recomendada: ¿Por qué las marcas deberían pagar una indemnización a lxs trabajadorxs textiles en empleo informal que son parte de sus cadenas de suministro?

A largo plazo

Las organizaciones de trabajadorxs han sugerido ideas innovadoras de políticas que ponen a lxs trabajadorxs en empleo informal en el centro de la recuperación económica y de la inversión estatal. Dichas ideas incluyen: cuotas para estxs trabajadorxs en las contrataciones y compras públicas de bienes y servicios; subsidios a gran escala y facilidades de préstamo para las inversiones de negocio; así como programas de creación de empleos enfocados en sectores que son cruciales para la sociedad, como los cuidados, las obras públicas y la infraestructura ecológica.


Ampliar la protección social

Lxs trabajadorxs también destacaron frecuentemente la necesidad de una protección social en el largo plazo. Sin tales protecciones durante la crisis, lxs trabajadorxs que no tenían la autorización o la posibilidad de trabajar se vieron obligadxs a agotar sus ahorros u obtener préstamos a tipos elevados de interés para sostener a sus familias.

Conforme se introdujeron aislamientos sociales obligatorios alrededor del mundo, se hizo evidente que estxs trabajadorxs –sin ningún tipo de seguridad social o de acceso a subsidios en efectivo– no podían de verdad quedarse en casa y ganarse la vida. Si hubiesen desafiado las reglas y salido de todas formas, habrían socavado el propósito de las medidas de aislamiento. Dicha realidad puso de manifiesto la importancia de garantizar que la protección social cubra a estxs trabajadorxs e hizo que muchos gobiernos reaccionaran en consecuencia. Existe hoy día la oportunidad de aprovechar esas medidas de auxilio para garantizar la protección social universal.

Lectura recomendada: Tomar impulso para ampliar la protección social

Consulte los instrumentos de política que los gobiernos han utilizado para apoyar a lxs trabajadorxs a sortear la crisis de la COVID-19:

Lectura recomendada: Políticas públicas durante la pandemia: lo que hicieron los gobiernos para llegar a lxs trabajadorxs más vulnerables


Poner fin a las prácticas punitivas

Debería permitirse a lxs trabajadorxs hacer su trabajo, acorde con el principio de ‘no hacer daño’, el cual protege sus lugares de trabajo y busca acabar con el hostigamiento, la confiscación, las multas y los desalojos.

El Programa de Derecho de WIEGO escudriñó las leyes y los reglamentos que regularon la actividad económica de lxs vendedorxs en empleo informal en África y Latinoamérica durante la crisis de la COVID-19. Halló que, por vez primera, se reconoció jurídicamente a algunxs vendedorxs de alimentos en empleo informal como agentes económicxs esenciales; aunque incluso en estos casos, el hostigamiento policial y los obstáculos burocráticos impidieron que muchxs trabajasen. Sin embargo, el papel de estxs vendedorxs como agentes económicxs no termina con la pandemia. Los gobiernos locales deberían echar mano de los aprendizajes que obtuvieron a partir de estas políticas para, con ello, diseñar estrategias a largo plazo que apoyen y protejan a lxs vendedorxs de alimentos en empleo informal.

Lectura recomendada: Regulación de la venta informal de alimentos en tiempos de la COVID-19 y más adelante: las mejores prácticas de África y América Latina


Promover un marco propicio jurídico y de políticas

Lxs trabajadorxs nos hicieron hincapié en la necesidad de modificar las políticas públicas. Estos cambios podrían incluir los siguientes: mejoras en la legislación laboral relativa al trabajo del hogar y en su aplicación; incrementos en los precios o salarios mínimos para lxs trabajadorxs que recolectan residuos municipales o que mercadean con residuos; salarios mínimos o remuneraciones a destajo mínimas para lxs trabajadorxs en domicilio; así como políticas inclusivas de venta ambulante.

En Delhi, la pandemia demostró que los enfoques anteriores de planificación fracasaron en tomar en cuenta las necesidades de la mayoría, lo que resultó en hambruna, desplazamientos y pérdidas de empleo y de vivienda. Cuando el gobierno abrió una consulta pública en torno al Plan Maestro de Delhi 2021-2041, lxs trabajadorxs en situación de pobreza de la ciudad –con el apoyo de WIEGO por medio de la campaña Main Bhi Dilli (“Yo también soy Delhi”)– pudieron dar un primer paso hacia una mejor reconstrucción al hacerse escuchar en el proceso de planificación urbanística.

Lectura recomendada: Reconstruir mejor: lxs trabajadorxs en empleo informal reivindican su derecho a una Delhi inclusiva


Acceso a las vacunas

Para agravar todavía más las inseguridades enfrentadas durante la pandemia, las regiones del mundo en donde viven y trabajan la mayoría de lxs trabajadorxs en empleo informal –partes de África, Asia del Sur y del Sureste y partes de Latinoamérica– han tenido un acceso limitado a las vacunas. La vacunación es una de las prioridades de lxs trabajadorxs para poder retomar sus medios de subsistencia de manera legal y segura.

Los bajos niveles de vacunación –producto de las inequidades en la distribución de las vacunas y de la reticencia ante estas– incrementan el riesgo de transmisión, hospitalización y deceso por COVID-19; pueden incluso provocar la aparición de variantes más peligrosas. Si no se protege a lxs trabajadorxs frente a la COVID-19, entonces la sociedad también queda desprotegida, lo que prolonga la pandemia y retrasa y trastorna la recuperación económica local y mundial. La vacunación contra la COVID-19 es una inversión en lxs trabajadorxs que ayudará a controlar la pandemia.

Lectura recomendada: Abogar por el acceso a las vacunas contra la COVID-19: experiencias de trabajadorxs en empleo informal

Asimismo, es necesario que los gobiernos apoyen la recuperación y la transición en materia de empleo y de los medios de subsistencia. Esto incluye permitir a lxs trabajadorxs retomar sus actividades, así como crear o facilitar nuevos empleos y el desarrollo de aptitudes.

Aquí puede encontrar un amplio panorama de los resultados del Estudio sobre la COVID-19 y la economía informal, a los que refiere este blog.


Foto superior: Orapin Sukwichit es una trabajadora en domicilio autoempleada de Bangkok. Crédito: Pattarapon Virat.