Esenciales pero desprotegidos: las trabajadoras y trabajadores en empleo informal durante la crisis
A medida que las ciudades de todo el mundo se paralizan para detener la propagación de la COVID-19, los gobiernos dependen de que un grupo de trabajadoras y trabajadores esenciales siga saliendo a trabajar para mantener a la gente alimentada e informada, para cuidar a las personas enfermas y vulnerables y para mantener las ciudades limpias y seguras, entre otros servicios cruciales. Antes de la crisis, sus condiciones económicas y laborales ya eran precarias. Ahora, sin protecciones legales ni sociales, trabajan para mantener a sus familias y garantizar que sus comunidades tengan el alimento y los servicios básicos que necesitan para sobrevivir, exponiéndose a un gran riesgo personal.
Pandemia: las personas trabajadoras en la economía informal necesitan con urgencia una sustitución de ingresos y más protecciones
El distanciamiento social y el autoaislamiento son posibilidades reales para las trabajadoras y trabajadores empleados de clase media que se encuentran bajo el amparo de la seguridad social, escribe Laura Alfers, responsable del programa de Protección Social de WIEGO. Pero las personas trabajadoras en empleo informal caen en un saco roto, excluidas tanto de las protecciones que brinda el trabajo formal como de los programas estatales de asistencia social, destinados a quienes viven en la extrema pobreza o están fuera del mercado laboral. Urge la implementación de medidas inmediatas, tales como los subsidios en efectivo de emergencia.
Esta nueva crisis acentúa las antiguas injusticias de la economía global
Durante 23 años, la red de WIEGO y sus aliados han estado señalando las precarias condiciones de las trabajadoras y trabajadores en empleo informal, cuyas contribuciones a la economía y a la sociedad son esenciales pero, lamentablemente, son menospreciadas. Ahora, la COVID-19 no sólo resalta los problemas existentes, sino que los profundiza. Sally Roever, Coordinadora Internacional de WIEGO, expone la manera en la que los diferentes grupos ocupacionales están a travesando esta crisis y lo que debe suceder ahora para evitar el colapso de los sistemas vitales urbanos.
COVID-19, las personas trabajadoras en empleo informal y el trabajo de WIEGO durante la crisis
Mientras las y los miembros de nuestro equipo mundial respetan las medidas de aislamiento, estamos trabajando arduamente para asegurarnos de que los reclamos de las personas trabajadoras de la economía informal sean escuchados, comprendidos y atendidos en el marco de esta crisis económica y sanitaria al mismo tiempo. Mantenemos una estrecha comunicación con las organizaciones de la economía informal para determinar sus necesidades y acompañarlas en la defensa de sus derechos. También hemos estado trabajando con especialistas en salud pública para generar orientaciones específicas para cada sector. De esta manera, buscamos colaborar en la reducción de riesgos para personas que desarrollan trabajos esenciales, tales como las recicladoras y trabajadoras del hogar. Esta información se actualiza regularmente en la sección de nuestro sitio web dedicada a la crisis de la COVID-19.