African home-based workers are at the bottom of craft supply chains. Through an increased understanding of those supply chains they could overcome some of the challenges they are facing and improve their livelihoods.
Alors que les villes du monde entier avancent vers la reprise, Delhi doit faire de même. Pourtant, au lieu de revenir à la « normalité » la ville doit être réimaginée et transformée pour devenir favorable aux travailleuse·eur·s, y compris celles·ceux de l’informel. Le plan directeur de Delhi pourrait être un outil essentiel pour construire une ville plus inclusive qui donne la priorité à la relance des moyens de subsistance et à la promotion du travail décent.
A medida que las ciudades de todo el mundo avanzan hacia la recuperación, también debe avanzar Delhi. Sin embargo, en lugar de volver a la ‘normalidad’, la ciudad debe reinventarse y transformarse para convertirse en una ciudad más amigable para lxs trabajadorxs, incluyendo a lxs trabajadorxs en empleo informal. El Plan Maestro de Delhi podría ser una herramienta esencial para la construcción de una ciudad más inclusiva que priorice la reactivación de los medios de subsistencia y la promoción del trabajo digno.
As cities around the world move toward recovery, so must Delhi. Yet instead of returning to ‘normal’, the city must be reimagined and transformed to become worker-friendly, including for informal workers. The Delhi Master Plan could be a critical tool in building a more inclusive city which prioritizes livelihood revival and the promotion of decent work.
In December 2020, the EU Council requested the EU Commission to draft a legal framework that would make it mandatory for all companies established or retailing in the EU to undertake human rights and environmental due diligence in their supply chains. Civil society is concerned that companies will simply repackage their existing protocols—codes of conduct and social audits—to meet their mandatory due diligence obligations.
En diciembre de 2020, el Consejo de la UE solicitó a la Comisión del mismo órgano que redactara un marco legal que obligase a todas las empresas establecidas en la UE, o que trabajen con ventas minoristas allí, a llevar a cabo la debida diligencia en materia de derechos humanos y medio ambiente en sus cadenas de suministro. A la sociedad civil le preocupa que las empresas simplemente adapten sus protocolos existentes (códigos de conducta y auditorías sociales) para cumplir con sus obligaciones de debida diligencia.
